Skip to content

¿Porque Marruecos es de los mejores destinos para viajar?

Marruecos se presenta como un destino veraniego excepcional, enriquecido por una cultura vibrante y única que captura la atención de todos sus visitantes. Desde las antiguas ciudades imperiales de Marrakech y Fez, hasta los zocos llenos de artesanías y especias, la multiplicidad cultural del país permite a los turistas experimentar un viaje inolvidable. La rica historia de Marruecos, fusionada con sus influencias árabes, bereberes y francesas, ofrece a los viajeros la oportunidad de conocer tradiciones singulares y sabores exquisitos.

Uno de los atractivos principales de Marruecos radica en su impresionante diversidad de paisajes. En un solo viaje, se puede disfrutar de montañas imponentes, como el Alto Atlas, playas soleadas en Agadir y paisajes desérticos fascinantes en el Sahara. Esta variedad geográfica no solo enriquece la experiencia turística, sino que también ofrece múltiples actividades al aire libre, desde el senderismo en las montañas hasta surfear en las olas del océano Atlántico. Este aspecto de versatilidad convierte a Marruecos en un destino accesible y adecuado para diferentes tipos de viajeros, ya sean aventureros, familias, o parejas en busca de una escapada romántica.

Además, el clima cálido y soleado de Marruecos durante los meses de verano brinda la oportunidad perfecta para disfrutar del aire libre. Con temperaturas que invitan a explorar jardines exóticos o relajarse en las playas, los turistas pueden aprovechar al máximo su tiempo al aire libre. Asimismo, la cercanía del país a Europa facilita el acceso, con numerosos vuelos directos y conexiones ferroviarias que permiten a los viajeros planificar escarceos cortos o estancias prolongadas con facilidad. Esto, sumado a la diversidad de actividades disponibles – incluyendo paseos en camello, excursiones al desierto, y exploraciones históricas – corrobora la certeza de que Marruecos es, sin duda, una opción predilecta para unas vacaciones de verano inolvidables.

Marrakech: La ciudad roja

Marrakech es un destino esencial en Marruecos, conocido por su vibrante cultura y arquitectura histórica. El corazón de la ciudad es la famosa Plaza Jemaa el-Fnaa, un lugar donde artísticos narradores de cuentos, músicos y comerciantes crean un ambiente vibrante. Al explorar la medina, los visitantes pueden perderse entre los estrechos pasajes donde se encuentran los tradicionales souks que ofrecen una variedad de productos artesanales, desde alfombras hasta especias. Además, no se puede olvidar la majestuosa Koutoubia, la mezquita más grande de Marrakech, que se eleva a 77 metros y es un ícono de la ciudad.

El desierto del Sahara

El desierto del Sahara ofrece una experiencia única en Marruecos. Un viaje en camello a través de las dunas de Erg Chebbi es una actividad imperdible. Los turistas pueden disfrutar de un impresionante atardecer en el desierto mientras se recuestan en la arena dorada. Acampar bajo un cielo estrellado en un campamento tradicional bereber brinda la oportunidad de experimentar la hospitalidad local y disfrutar de una deliciosa cena de tagine.

Las montañas del Atlas

Las montañas del Atlas son perfectas para los amantes del senderismo. Con picos que superan los 4.000 metros, esta cadena montañosa ofrece rutas desafiantes y panorámicas vistas impresionantes. El pueblo de Imlil, conocido como la puerta de entrada al Toubkal, es el punto de partida ideal para aquellas personas que buscan una conexión más profunda con la naturaleza. Las excursiones guiadas también ayudan a los visitantes a apreciar la rica cultura bereber de la región, desde la arquitectura tradicional hasta las costumbres locales.

Ciudades costeras como Essaouira

Por último, Essaouira es una ciudad costera que cuenta con hermosas playas y un ambiente relajante. Esta ciudad es famosa por su medina, que es patrimonio de la humanidad por la UNESCO, y sus murallas que datan del siglo XVIII. Los turistas pueden disfrutar de actividades acuáticas como el windsurf y el kitesurf, así como de deliciosos mariscos frescos en los numerosos restaurantes frente al mar. Con su encantadora mezcla de historia y ocio, Essaouira se presenta como un oasis perfecto para descansar después de explorar Marruecos.

Actividades imperdibles en Marruecos

Durante el verano, Marruecos se convierte en un destino vibrante y lleno de oportunidades para explorar y disfrutar de diversas actividades. Una de las experiencias más enriquecedoras es recorrer los zocos y medinas de las ciudades como Marrakech, Fez y Essaouira. Estos mercados tradicionales son un festín para los sentidos, donde los visitantes pueden sumergirse en un laberinto de colores, olores y sonidos, y encontrar desde artesanías únicas hasta especias aromáticas. La interacción con los vendedores locales también es una oportunidad ideal para aprender sobre la cultura y las tradiciones marroquíes.

Otro aspecto destacado de la visita a Marruecos es la posibilidad de degustar su rica gastronomía. Pasar una velada en un riad, donde se ofrece una cena tradicional marroquí, permite a los viajeros experimentar la calidez de la hospitalidad marroquí, así como platos emblemáticos como el cuscús y el tajín. Además, participar en una clase de cocina puede resultar en una actividad divertida y educativa, permitiendo a los turistas llevarse un poco de Marruecos consigo a través de sus sabores.

Para aquellos que buscan una aventura más intensa, un tour por el desierto del Sahara es imperdible. Las excursiones suelen ofrecer paseos en camello al atardecer, lo que proporciona una experiencia inolvidable bajo las estrellas. La inmensidad del desierto y el silencio que lo rodea son inigualables, creando momentos de introspección y conexión con la naturaleza.

Adicionalmente, la costa atlántica brinda la oportunidad de practicar deportes acuáticos. Destinos como Agadir o Taghazout son ideales para surfistas y amantes de la playa, ofreciendo condiciones óptimas para disfrutar del mar y el sol. En ciertas épocas, también se organizan festivales locales, donde la música, el arte y la danza celebran la identidad cultural del país, proporcionando un contexto vibrante y festivo para los visitantes.

Consejos para visitar Marruecos en verano

Visitar Marruecos en verano puede ser una experiencia fascinante, pero es fundamental estar bien preparado para disfrutar de su riqueza cultural y natural sin contratiempos. La primera recomendación es elegir la mejor época para viajar. Aunque el verano abarca varios meses, muchos viajeros prefieren los meses de junio y septiembre, cuando las temperaturas son más moderadas, facilitando la exploración de ciudades como Marrakech, Fez o Casablanca.

La vestimenta adecuada es esencial para adaptarse al clima y las costumbres locales. Optar por ropa ligera y transpirable es recomendable para soportar las altas temperaturas. Sin embargo, es importante que la vestimenta respete la cultura local; se sugiere cubrir los hombros y las piernas, especialmente en zonas rurales y lugares de culto. El uso de un sombrero y gafas de sol puede ayudar a protegerse del sol intenso.

La seguridad y salud son otros aspectos cruciales a tener en cuenta. Marruecos es generalmente seguro para los turistas, pero es aconsejable mantener precauciones básicas, como evitar áreas poco iluminadas por la noche y estar atento a las pertenencias personales. Se recomienda beber solo agua embotellada y tener en cuenta la comida callejera, optando por restaurantes bien valorados para reducir el riesgo de intoxicaciones alimentarias.

En Fin por Ultimo

En cuanto a la gestión del dinero, es recomendable llevar una mezcla de efectivo y tarjetas de crédito. La moneda local es el dirham marroquí, y se sugiere cambiar dinero en bancos o casas de cambio oficiales para obtener las mejores tarifas. Respecto a las propinas, son una práctica común en Marruecos; se sugiere dejar alrededor del 10-15% en restaurantes y dar propina a guías o personal de servicio.

Por último, familiarizarse con algunas costumbres culturales es muy beneficioso. Utilizar saludos en árabe o francés, como «Salaam» o «Bonjour», puede enriquecer la interacción con los locales. Al ser respetuoso con las tradiciones culturales, los viajeros podrán disfrutar de una experiencia más auténtica y enriquecedora en este hermoso país.